Joven indígena cumplió su sueño de ser piloto y se graduó en Estados Unidos
Aunque muchos digan que es imposible, si se trabaja con esmero, cualquier sueño se puede hacer realidad.
Un joven indígena, es el fiel reflejo del trabajo duro. Demostró que, cuando se tiene un sueño, por más lejano que parezca o por más adversidades que existan en el camino, si no se pierde el foco se puede lograr lo que sea.
Luis Ángel es el joven protagonista de esta maravillosa historia de superación y el mejor ejemplo para los niños que sueñan con ser astronautas, científicos, deportistas, doctores o pilotos, como él algún día lo pensó. (Familias indígenas trabajarán con tecnología para mejorar el proceso de sembrar maíz)
Su historia
Desde que era pequeño, desde su casa en Panamá, en su natal Ngäbe Buglé, región del país centroamericano habitada por pueblos indígenas, el pequeño Luis se imaginaba surcando los cielos pilotando un avión.
#Nacionales Luis Angel Marcucci Bejerano, de 21 años de edad, oriundo de Besikó en la Comarca Ngäbe Buglé se convirtió en el primer piloto indígena en graduarse en los EE. UU. gracias a una beca del IFARHU. pic.twitter.com/DFXb7j8bRH
— Radio Chiriquí (@RadioChiriqui) August 13, 2020
Luis Ángel Marcucci Bejerano, como es su nombre completo, dejó a su familia en el pueblo ancestral y se aventuró solo en Estados Unidos, sin saber el idioma pero con todas las ganas de salir adelante y cumplir su sueño, luego de investigar dónde quedaban las mejores escuelas en esta carrera.
“Cuanto no tienes nada que perder solo queda arriesgarte por tus sueños”, dijo el joven para el medio Panamá América.
El joven llegó al país de las oportunidades apoyado por el gobierno de su comarca tras ser aceptado en la escuela de aviación y, tras muchos años de estudio, esfuerzo y dedicación, logró convertirse en el primer joven indígena en graduarse como piloto en este país. (Por primera vez, más de 40 niños indígenas se graduaron como policías cívicos)
“Al principio no me fue fácil hablar y escribir el inglés, pero lo logré a través de los cursos que tomé antes de irme para ese país”, añadió el ahora piloto.
Ahora, es un ícono que inspira a otros indígenas de su país y espera trabajar en Copa Airlines y la Compañía Panameña de Aviación, mientras aprende a hablar mandarín.