Nelson Crispín sigue escribiendo la historia de Colombia en los Juegos Paralímpicos. El nadador le dio una nueva medalla al país tras terminar segundo en la prueba de los 100 metros libres en la categoría S6 con un tiempo de 1:04.82.
Sin duda, Tokio ha dejado una huella imborrable en la vida de Nelson, sus medallas olímpicas y su récord, lo hacen acreedor del título del colombiano con más medallas olímpicas en toda la historia del deporte.
Con esta victoria, Colombia llegó a 20 medallas, 3 de oro, 7 de plata y 10 de bronce, y se ubica en el puesto 21 del medallero general, que es liderado por China, seguido de Reino Unido y el Comité Paralímpico Ruso.
Este santandereano de 29 años encontró en la natación un refugio para superar el complejo por la enfermedad que le habían diagnosticado desde niño. Nelson nació en Floridablanca, Santander el 10 de mayo de 1992 con acondroplasia, una enfermedad que afecta el crecimiento óseo de los cartílagos. (Brazadas de gloria, Daniel Serrano gana oro y vuelve a ser triple medallista Paralímpico)
A medida que pasaban los años, Nelson Crispín no crecía igual que los niños de su edad por lo que fue víctima de constantes burlas mientras estaba en el colegio. Su mamá, Ana Victoria Corzo, asistía al médico en busca de un especialista que pudiera tratar a su hijo y uno de ellos le sugirió que lo mejor que podía hacer era inscribir a su hijo en algún deporte. Así, llegó a la natación y encontró en el agua la paz que tanto necesitaba.
Cuando empezó a entrenar, el deportista tenía 12 años y su familia no tenía los recursos suficientes para pagar las clases. Sin embargo, la mamá del deportista logró un acuerdo con el entrenador para que le enseñara a su hijo a cambio de tamales que ella misma preparaba. (José Lemos le da una nueva medalla a Colombia en salto largo)
Ir al estadio diariamente a entrenar le costaba a Nelson Crispín no solo el dinero de los pasajes si no montarse al bus solo y timbrar para pedir la parada, esa era la parte más difícil. Al principio evitaba pedir ayuda y muchas veces el bus lo dejó lejos, pero superó su miedo y aprendió a pedir ayuda para poder gozarse los entrenamientos.
Nelson es el cuarto hijo de cinco que tuvieron Ana Victoria Corzo y Luis Antonio Crispín. Su familia es su motor, sus hermanos lo admiran. Su profesor, William David, no solo fue quien lo impulsó a meterse por primera vez en una piscina, también ha estado junto a él apoyándolo en cada brazada.
La mamá de Nelson dice que él está bendecido, ya que nació un domingo 10 de mayo en vísperas de la celebración del Día de la Virgen, por lo que le agradece hacerlo un campeón en las piscinas y en la vida.
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