El “niño ángel” del Chapecoense continúa cumpliendo sus sueños y ahora fuera de Colombia
La vida le ha cambiado notablemente desde el accidente del equipo de fútbol ocurrido el 28 de noviembre de 2016.
Johan Ramírez ahora tiene 19 años, fue el niño colombiano que junto a su padre, Miguel Ramírez, ayudaron a los rescatistas a llegar a la montaña antioqueña donde se estrelló el avión que transportaba al equipo brasilero Chapecoense, que viajaba para cumplir un partido de la Copa Libertadores contra el Atlético Nacional.
El impacto le arrebató la vida a 71 de las 77 personas que iban a bordo, los sobrevivientes se salvaron gracias a la oportuna y desinteresada ayuda de este padre e hijo campesinos de la zona donde ocurrió el accidente. (Maluma y su fundación envían ayudas humanitarias a Providencia y Chocó)
Después de ayudar en el rescate, Johan fue homenajeado y le ayudaron a cumplir sueños como tener una casa propia, una beca para estudiar en la universidad, viajar a otros países, conocer a los jugadores del Real Madrid (en especial a James Rodríguez), recibir la Orden de Caballero en Brasil, y ahora, estudia inglés en Estados. Unidos (Johana Bahamón y Claribeth Mosquera, una bella historia de segundas oportunidades)
Miguel narró a El Tiempo que un día Johan llegó y le dijo: “Papá, le voy a hacer una pregunta: ¿Usted qué piensa de que yo me vaya a estudiar inglés? ¿Me apoya?”, a lo que su padre respondió: “Mijo, si eso le va a permitir a usted avanzar y cumplir sus sueños, cuente conmigo”.
Así es la nueva vida del “niño ángel” del Chapecoense
En Colombia estudió dos semestres presenciales de Ingeniería Industrial en la Universidad Católica de Oriente, y como ahora hace el tercero de forma virtual, aprovechó la oportunidad para viajar a Estados Unidos y estudiar el idioma que considera es muy importante para su carrera, inglés. (“Juntos saldremos adelante”, Shakira apoya a los damnificados en San Andrés y Providencia)
La universidad la cursa con la beca ‘Jóvenes ciudadanos de paz’ que le otorgó el expresidente Juan Manuel Santos para agradecerle su solidaridad en el accidente.
“Johan es un muchacho bendecido por Dios. No es porque sea mi hijo, pero qué muchacho para ser buen ser humano, buen hermano, buen amigo. De todos se hace querer. Yo me siento muy orgulloso de él, de su gran corazón. No necesito mentir, ese muchacho es todo”, afirmó Miguel al periódico.
*Con información de El Tiempo.
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