Esta es la historia de la superabuela que vivió 117 años
María Branyas Morera, la persona más anciana del mundo con 117 años, falleció. Este es su legado.
María Branyas Morera, la persona más anciana del mundo, falleció a los 117 años en la Residencia Santa María del Tura, en Cataluña, España. Nacida el 4 de marzo de 1907 en San Francisco, Branyas superó dos guerras mundiales y el régimen de Franco. Su vida, marcada por una notable longevidad, fue acompañada de una presencia activa en redes sociales, donde era conocida como la superabuela catalana.
A pesar de los desafíos de la vida moderna, incluyendo la pandemia de COVID-19, Branyas se mantuvo vital y comunicativa hasta el final.
La investigación sobre su longevidad reveló que su genética, su estilo de vida saludable y su capacidad para superar adversidades jugaron un papel crucial en su longevidad.
Here’s a picture of Maria Branyas Morera celebrating her 117th birthday from her nursing home in Catalonia 🥰️
📷 Residència Santa María del Tura pic.twitter.com/hTOJPgU98B
— Guinness World Records (@GWR) March 4, 2024
El catedrático de genética Manel Esteller destacó que la combinación de una dieta saludable, como la dieta catalana, y una vida sin estrés contribuyó a su edad avanzada.
Con la muerte de Branyas, el título de la persona más longeva del mundo ha sido heredado por Tomiko Itooka, una japonesa de 116 años. Itooka, originaria de Ashiya, Japón, ha sido reconocida por su notable vitalidad, que incluye su amor por el alpinismo.
A lo largo de su vida, Itooka ha mostrado una resistencia impresionante, ascendiendo montañas incluso en su avanzada edad.
La transición del título a Itooka pone de relieve el continuo interés en los estudios de longevidad y la importancia de comprender cómo factores genéticos y ambientales influyen en la vida prolongada.
Branyas dejó un legado de sabiduría y fortaleza que sigue inspirando a quienes buscan comprender los secretos de una vida larga y saludable.