David Ospina no quería ser portero y se convirtió en el mejor ¡Conoce su historia!
El arquero de la Selección Colombia no quería ser portero, pero sus increíbles condiciones lo convirtieron en uno de los más grandes.
La trayectoria futbolística de David Ospina ha estado marcada por constantes cambios desde muy pequeño.
De niño siempre se destacó por ser un líder tanto dentro como fuera de los terrenos de juego, algo que lo hacía resaltar por encima de los demás. Sin embargo, todo este liderazgo no lo demostraba dentro del arco, sino anotando goles y cobrando penaltis.
“Desde los tres años uno iba a mercar y él siempre iba por donde estaban los balones. Más de una vez hizo daños por estar pateando y jugando constantemente en la casa”, dijo Hernando Ospina, papá del arquero colombiano en entrevista con el diario Semana.
Sus inicios en el arco
La forma en la cual inició David Ospina a tapar fue bastante particular, debido a que en un entrenamiento no fue el arquero titular del equipo, por lo cual él entró al arco y lo hizo de gran manera atajando penales. (Davinson Sánchez ofrece su apoyo solidario con la gente de Yerry Mina)
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“Era un atajador de penales impresionante desde pequeño, le decíamos que apostáramos una gaseosa y siempre ganaba él. Sabía cómo aguantar al cobrador hasta el último minuto y tenía grandes reflejos para estirarse”, comentó Ceferino García, entrenador juvenil del actual arquero de la Selección Colombia, en entrevista con Semana.
Siempre se destacó por encima de los demás
En Colombia uno de los torneos juveniles más importantes del país es el Pony Fútbol. Este campeonato se convirtió en una constante para David Ospina, debido a que ha sido uno de los pocos jugadores que pudieron estar en tres ediciones de este certamen. (María Fernanda Gutiérrez, la mujer que conquistó el corazón de Egan Bernal)
Los entrenadores aseguran que en sus inicios un factor determinante que lo llevó a estar en lo más alto del fútbol internacional fue su liderazgo, y él supo aprovechar las oportunidades que se le presentaban.
“Él era muy ágil y veloz en la salida, además un líder tanto dentro como fuera de la cancha y eso lo hacía un jugador muy completo”, indicó Ceferino en aquella entrevista.
Todos los esfuerzos lo llevaron al éxito
Sin duda todas sus habilidades lo convirtieron en un referente histórico para el fútbol colombiano. Sin embargo, sus ganas de mejorar y de retarse a sí mismo fue lo que lo catapultó en las ligas más importantes de Europa. (Los negocios de Nairo Quintana: el ciclista que tiene genialidad como empresario)
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Fueron esa iniciativa propia y el apoyo de su familia lo que lo hizo llegar al viejo continente para seguir con su carrera deportiva y crecer como persona y ser humano.
“Las ganas de seguir mejorando, de conocer otro fútbol y el apoyo de la familia. En ese momento le propuse a mi señora que nos viniéramos (a Europa) y ella aceptó de una. O sea que se aceleró bastante la relación. Pero ella se convirtió en un apoyo muy importante”, finalizó el portero colombiano durante una entrevista con el diario El Tiempo.
Sin duda todos los sacrificios de infancia, las ganas y el talento de querer salir adelante llevaron a David Ospina a ser un referente para toda Colombia, cumpliendo su sueño de pequeño que era representar al país y dejarlo en lo más alto.
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