Por primera vez, nacen crías de guacamaya azul en el Centro de Fauna Silvestre del Cesar
Las guacamayas azulamarillas habitan desde Panamá hasta Argentina.
En septiembre de 2019 de acuerdo a un estudio realizado por BirdLife International, una asociación mundial de organizaciones de conservación de las especies de aves en todo el mundo, declaró en peligro de extinción la especie de Guacamaya azulamarillo.
Sin embargo, gracias a los cuidados y el amor que se le dio a una pareja de esta especie en el Centro de Atención y Valoración de Fauna y Flora Silvestres, de Corpocesar, dio como resultado el nacimiento de dos crías de este tipo de aves.
“Estos meses fueron vitales para la evolución de las crías; nacieron hace dos meses y medio. Nos sentimos contentos de este nacimiento y nos llena de alegría su evolución. Felicito al equipo del Centro de Fauna por el esfuerzo diario por proteger y rehabilitar a todas las especies que llegan” manifestó el Director de Corpocesar, John Valle Cuello.
La pareja fue decomisada por tráfico ilegal
La caza indiscriminada de estos animales silvestres para el comercio tanto nacional como internacional ha hecho que esta especie hay sido declarada en peligro de extinción. Sin embargo, en diferentes países de Latinoamérica hay esperanza de rescatar la especie gracias al nacimiento de polluelos.
Este fue el caso de la pareja de guacamayos incautada durante los primeros meses de 2019. Luego de estar un año en el Centro de Fauna Silvestre se dio una reproducción exitosa en cautiverio.
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“El periodo de incubación natural varía entre los 23 a 25 días, no se detectó anomalía durante los primeros chequeos constantes, que mostraron buena evolución. Cada nacimiento que se produce en nuestras instalaciones, representa un paso gigante en la lucha de la conservación de la especie” aseguró Edgar Patiño Flórez, Director de la Red de Fauna y Flora Silvestres de Corpocesar.
Cuidar estas especies es tarea de todos
A los ejemplares ya les empezaron a salir las primeras plumas azules y están en perfecto estado de salud. Corpocesar hizo un llamado para cuidar a las aves nativas de Colombia y evitar que estén en peligro crítico de desaparecer. Según el artículo 38 del Código Penal y la Ley 1333 de 2009, el tráfico ilegal es penalizado hasta con 96 meses de cárcel.